Parece que aún fue ayer –dirían Los Suaves– cuando hablábamos de la publicación de Debian 9 Stretch, un lanzamiento que nos trajo software nuevo y la fiabilidad habitual de la distro. También algunos problemas en las imágenes de instalación, ya felizmente solucionados.
Pero los desarrolladores de Debian no descansan y este fin de semana ya tenemos la primera actualización importante, una Debian 9.1 que incluye diversas correcciones de errores, actualizaciones de seguridad y mejoras. Tampoco se han olvidado de la old-stable Jessie que ahora alcanza su edición 8.9.
Estar en Debian significa estabilidad, más en el sentido de que una determinada configuración y conducta del sistema no vaya a cambiar tras una actualización (lo que la hace genial para un servidor) , que en la creencia de que todos sus componentes sean irrompibles e inmunes a bugs.
Sin desmerecer el trabajo de testing previo, superior al de la mayoría de distribuciones GNU/Linux, y que nos ofrece un producto de salida muy pulido; Debian a largo plazo es estable porque el software no cambia. El resto –siguiendo con Los Suaves– son «ilusiones, castillos de arena en el fondo del mar». Sin salirnos de la distro, la rama testing parece más adecuada para su uso en el escritorio.
El punto de estas actualizaciones es por tanto resolver errores graves, que afectan a la funcionalidad del sistema, no tanto incluir ninguna nuevas versiones de programas simplemente porque traigan más características, una mejor calidad de código, soporten más hardware o resuelvan algún bug específico (o creen otro, que de eso nadie está a salvo).
Debian 9.1 corrige 26 fallos de seguridad, que conciernen a los siguientes paquetes: otrs2, tor, request-tracker4, gnutls28, irssi, linux, glibc, exim4, spip, tomcat8, jython, flatpak, apache2., drupal7, openvpn, libgcrypt20, jabberd2, tiff, bind9, xorg-server, undertow, spice, nginx, knot, evince, heimdal.
Al mismo tiempo elimina una utilidad de conectividad IPv6 llamada AICCU y actualiza 54 componentes de su software, liberando de errores herramientas como apt, gnome-settings-daemon, grub-installer, intel-microcode, nvidia-graphics-driver, openssh, pulseaudio, rkhunter o systemd.
Por su parte Debian 8.9 soluciona 68 fallos de seguridad, efectúa correcciones de errores en 53 programas diferentes y se deshace de otros 8.
Imágenes actualizadas de Debian 9.1 ya están disponibles en el apartado de descargas de la distro. Los usuarios de ediciones previas de Jessie y Stretch, tan solo precisan actualizar su sistema normalmente para situarse en estas versiones.
Una vez actualizado, «tu ya no puedes volver atrás» (bueno en realidad si 😉 )
Pues menudo tomate hay montado con Debian Jessie y Debian 9. Una pena que no se hayan puesto de acuerdo y los criterios se unificaran. Veremos al final que es lo que pasa con una distribución de las mas punteras y que ha divido a una comunidad.
Me he perdido algo. ¿Es posible que te refieras a Devuan y toda la movida con systemd?
Pues sin llegar a ser polémico más bien algo objetivo desde mi punto de vista, para mí systemd se ha convertido en un cancer. Ya no sé dónde comienza systemd y donde termina el kernel y con el peligro de que con cada actualización del kernel, este se vuelve más dependiente de él, cumpliendo así con los temores de muchos y dándole la razón a la larga sobre las intenciones de este personaje llamado Mark. Quizás suene a broma y en verdad diré esto en parte cómo una broma pero también poniéndole un matiz de seriedad. Si esto sigue así, faltará poco para tener GNU/Systemd en vez de GNU/Linux. Todo eso probablemente pase si Linus se muere y ya no haya nadie que le ponga un parao’ al susodicho Mark como Linus tiende a hacer. (Aún recuerdo claramente el «Fuck you, Nvidia» XD)
Después de tanta polémica con el init y siendo systemd el «init de facto», éste tampoco convence a Tolvards. Recorden que este sujeto creó GIT para alojar el código del kernel y no sería raro que creará un init para Linux y así dar un punto final sobre el asunto y transformar al nuevo init de facto
Pues Devuan y listo, no?, opciones hay…, el problema es cuando todos critican algo y terminan usandolo.
Exacto.Of corse.
No ha mucho que recuerdo las historias que se contaban sobre la estabilidad y la firmeza (como una roca) de Debian. Ahora ha quedado en Dev-On y no sabemos como acabará el último capitulo de esta historia. Personalmente me entristece y no seré yo quien, al menos de momento, instale esta magnifica distribución.
Os paso una versión de palabras para Julia que me gusta más:
¿Parece que no estás muy de acuerdo con el significado de estabilidad de Debian? _O/
A mí no me convence su comunidad, que piensa que es mejor perder el tiempo en algo que ya resuelven distros más al día.
Te contesto con un ejemplo: Debian Jessie salió en 2015 con –entre otros– GNOME 3.14 como escritorio.
Era la edición «estable» de GNOME Shell que había salido el año anterior, todavía con bastantes bugs y empeñada en eliminar cosas de GNOME 2, más que en introducir características nuevas.
Debian Jessie murió –bueno, en realidad sigue como old stable– con ese escritorio, cuando otras distros hacía tiempo andaban con GNOME +3.20 o las rolling ya con GNOME 3.24 (oh! sorpresa las rolling utilizan versiones de software estable).
Repito que para un servidor está bien, porque no puedes arriesgarte a un problema por introducir una nueva característica y Debian de salida está bastante libre de bugs graves. Pero condenar a un usuario de escritorio a utilizar versiones vetustas de software no tiene demasiado sencillo.
Por eso me rebelo un poco contra ese significado de estabilidad. Hay distros de ciclo regular en sus lanzamientos y rolling releases, y después dentro de eso las hay más o menos estables.